Una tarde, un nuevo capítulo
Ha sido como el libro que empezamos a leer y por algún motivo inexplicable, lo olvidamos en la mesilla de noche. Nunca lo llegamos a terminar y siempre tenemos en mente que deberíamos abrirlo por donde el marcapáginas nos señala y retomarlo. Han pasado años y han pasado cosas pero nada de lo que no terminamos ha muerto. Tan sólo hacía falta quitarle una fina capa de polvo. Está, como ese mejor amigo, el libro, esperando a volver a ser abierto; a cogerlo con ganas y a empezar un nuevo capítulo.
Cada vez con mas frecuencia, me quedo parado, y ahogado miro la nada, intentando comprender porqué siento esa presión en el pecho.
ResponderEliminarY sí, ahi está, presionando mi cuello como una mano que "in extremis" encuentra su cabo.
Hay un momento en la vida en el que te das cuenta, que todo lo que amamos, queremos, todas esas cosas que nos han costado toda nuestra vida conseguir, pueden perderse en un momento, escapársenos de las manos... Hay que apreciar cada momento, disfrutar todo lo que podamos de cada escalofrío que provoco al rozar tu piel. al fin y al cabo, lo que jamás podremos dominar es el paso del tiempo, el bien más preciado, porque llegará el momento en el que únicamente pidamos, un dia más, una hora más... a tu lado.